No tiene estrellas Michelin pero si los mayores del Centro de Día y Residencia Geriátrica Los Llanos Vital se la pudieran otorgar, lo harían sin dudarlo. Sagrario, junto con Rosa, son las encargadas de poner sabor a sus comidas. Sagrario es una de las chefs del “restaurante” de Los Llanos Vital, situado en plena Sierra de Madrid, lleva más de seis años en nuestra cocina, y haciendo honor a su cargo nos recibe entre fogones.
Su jornada de trabajo empieza a las 10 de la mañana y termina cuando los mayores han cenado. Le gusta quedarse hasta el final porque no se va tranquila a casa sin saber si su público ha disfrutado de su comida.
En un día normal, Sagrario tiene a la mesa a 130 personas a mediodía (entre usuarios de la Residencia, del Centro de Día y trabajadores) y a unas 90 para cenar que llegan a consumir, ni más ni menos, que unos 2.000 kilos entre comida y bebida a la semana.
Pero… ¿Cómo es cocinar para tanta gente?
“No es muy complicado. Es como cuando haces la comida para tu casa pero más cantidad. Le pones un poco de cariño y ya está”.
Ese es su ingrediente secreto, Sagrario le pone mucho cariño a lo que hace. Nuestros mayores lo saben y lo valoran, pero no se callan, si algo no les ha gustado se lo dicen y ella toma nota. Recuerda ese día en el que se olvidó de hacerles un bizcocho y se lo reclamaron: “No nos has hecho el bizcocho, no lo vamos a olvidar” le decían entre risas.
Seguridad ante todo.
La cocina de Los Llanos Vital está completamente al día en lo que a inspecciones de calidad se refiere. Sus cocineras cumplen a rajatabla con todos los requisitos exigidos por la Comunidad de Madrid, porque la seguridad de nuestros mayores es lo primero. Los alimentos se revisan a diario y cada mes se lleva a cabo una inspección externa en la que se analizan, incluso, las superficies de la cocina.
¿Cómo son los menús que salen de la cocina de Los Llanos Vital?
Nuestros menús cambian en función de la estación del año en la que nos encontremos y de las necesidades puntuales de cada uno de nuestros mayores. Nos adaptamos todo lo que podemos a los gustos de nuestros comensales creando una dieta sana, equilibrada y adaptada donde no pueden faltar esos platos de cuchara que tanto gustan a nuestros mayores.
«Lo que más les gusta son las patatas con carne, con bacalao o con costillas. Todo lo que es de cuchara”
Sagrario está preparando uno de sus platos estrella: las patatas con costillas. Es completamente consciente de que se va a llevar a casa más de una sonrisa. Porque a ella le gusta hablar con los mayores y no pasa un día sin que se acerque a verles a sus mesas para saber sí les ha gustado la comida.
Todos y cada uno de los menús están aprobados tanto por la doctora como por la directora del Centro. Hay residentes que no pueden tomar algunos alimentos en determinados momentos y se hace una comida especial para ellos. Por ejemplo si alguien está yendo a diálisis no puede tomar tomate, nuestras cocineras saben que su plato no debe tenerlo y se aseguran de que no caiga en él ni una pizca del mismo.
Sagrario cuida a nuestros mayores como una profesional más del Centro, porque es toda una profesional de la cocina de altura en Los Llanos Vital.